Un sistema de calefacción apropiado para tu hogar es crucial en esta temporada invernal. En este artículo, te presentamos una guía que detalla los sistemas disponibles en el mercado, sus adaptaciones a distintos espacios, así como sus ventajas y desventajas.

¿Cuál es el mejor sistema de calefacción para mi hogar?

Contar con un ambiente cálido durante los meses invernales garantiza comodidad y bienestar. Sin embargo, es esencial comprender que existen diversos sistemas de calefacción y factores determinantes para seleccionar el más adecuado para tu hogar.

A continuación, te proporcionamos los factores clave para elegir el sistema de calefacción más adecuado para tu vivienda:

¿Cómo elegir el mejor sistema de calefacción?

El primer paso para determinar cuál es el mejor sistema de calefacción para tu hogar es evaluar las siguientes condiciones:

El clima

El tipo de clima en tu ubicación (húmedo y constante o seco y frío) influirá significativamente en la elección del sistema de calefacción más apropiado.

El tamaño y la orientación de la casa

Las dimensiones y la orientación de tu residencia en relación al sol impactarán en la selección de un sistema de calefacción, ya sea más potente (para interiores grandes) o más básico.

El coste

Considerar no solo los costos de instalación y mantenimiento, sino también la eficiencia energética a largo plazo, puede ayudarte a tomar una decisión más informada. En ocasiones, la elección de un sistema más productivo puede resultar más económica a largo plazo, a pesar de una inversión inicial más alta.

Tras analizar las condiciones de tu hogar y buscando orientarte hacia una decisión basada en costos, eficiencia y reducción de impacto ambiental, ofrecemos una visión general de los sistemas de calefacción disponibles y sus beneficios.

Sistemas de calefacción

Caldera de Pellets

Este sistema, en pleno auge, emplea pellets para calentar tanto espacios pequeños como grandes, siendo una opción amigable con el medioambiente al usar energía renovable. La combustión eficiente reduce las emisiones de CO2, distribuyendo el calor hacia las estancias mediante un intercambiador de alta eficiencia. Requiere espacio de almacenamiento en casa y una salida de humos.

Calderas de condensación

Funcionan con gas y son utilizadas en un 32,3% de los hogares españoles. Usan gas natural para calentar agua distribuida por un circuito interno hacia diferentes áreas. Es uno de los sistemas más utilizados y económicos en comparación con la electricidad. Sin embargo, la variante con gas butano puede generar olores tóxicos y requiere ventilación y mantenimiento profesional constante.

Radiadores de agua

Este sistema de calefacción se combina usualmente con una caldera de gas natural debido a que su funcionamiento se hace a través de la emisión de calor con agua caliente.

Mediante un generador, el agua se calienta y circula por el interior de los radiadores recorriendo un circuito cerrado. Los radiadores se calientan gracias al contacto con el agua caliente y emiten ese calor en la estancia donde se encuentren.

Una de sus grandes ventajas es que es un sistema de calefacción de rápido calentamiento. Si bien la instalación del servicio es costosa si no se cuenta con caldera y radiadores, es de los sistemas más eficientes y económicos en cuanto a su consumo.

Calefacción eléctrica

Funciona de una forma sencilla ya que, como su nombre lo dice, únicamente debe conectarse a una red eléctrica. Es un sistema seguro ya que trata con energía limpia. No se corren riesgos de pérdidas de gas ni de otras sustancias tóxicas.

Es importante mencionar que existen diferentes tipos de calefacción eléctrica:

Bombas de calor

Son sistemas de aire acondicionado con doble funcionalidad: calor en invierno y frío en verano. La bomba toma la energía del entorno natural y lo lleva al interior para calentarlo (en el caso del aire frío) y viceversa. Es un sistema cómodo ya que se puede elegir la temperatura, programarla y obtener una distribución rápida de la misma.

Requiere de la instalación de una unidad exterior y una interior, hecho que puede suponer un problema estético o de espacio. Además de esto las variaciones en el precio de la luz pueden convertirla en una de las opciones menos económicas.

Suelo radiante

También es conocido como hilo radiante. Este sistema va perfecto si el presupuesto para ti no es un problema o si te encuentras realizando remodelaciones en tu piso.

Funciona gracias a una red de tubería plástica instalada bajo el pavimento que hace que cuando el agua se caliente, haya una emisión de calor desde el suelo. Este tipo de calor es muy útil en zonas más frías, tiene un bajo consumo energético y es respetuoso con el medioambiente.

Emisores termoeléctricos

Los emisores termoeléctricos o emisores térmicos son los equipos de calefacción que suelen ir colocados en una pared y que funcionan usando energía de una resistencia eléctrica. Están fabricados en su mayoría de aluminio, material que permite la conducción de calor a la vez que un gran ahorro energético.

Una de sus grandes ventajas, además de su fácil instalación, es que sigue desprendiendo calor después de algunas horas de estar apagado pues tiene un alto poder calorífico. Pero, ¡ten cuidado! Si lo quieres para uso constante y tiene más de 1500W podrás ver reflejado un aumento en la factura de la luz.

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